Forestar nuestro barrio incorporando árboles frutales en nuestras instituciones y espacios públicos.
-Fortalecer la seguridad alimentaria
-Fomentar la interrelación comunitaria a través de los frutos obtenidos de las plantas.
- Generar conciencia ecológica y generar lazos en la comunidad relacionándose con la naturaleza.
El barrio carece de árboles, se podría cubrir esa necesidad, y ademas atender otra, a través de árboles frutales. Debido a la situación económica que atraviesa nuestro país, se observa que familias de menor poder adquisitivo se ven obligadas a restringir algunos alimentos y principalmente “las frutas”, fuente importante de nutrientes y vitaminas para el desarrollo de los individuos.
Todos los vecinos del barrio
Cuidado de los árboles por parte de los vecinos.
El Proyecto es NO FACTIBLE. Los árboles frutales implican desafíos significativos en términos de mantenimiento y gestión que superan la capacidad o los recursos actuales del municipio.
* Presenta riesgos legales y de seguridad alimentaria que necesitan ser cuidadosamente evaluados y mitigados.
* Requiere una infraestructura y un plan de manejo completamente diferentes a los que están contemplados en el programa de forestación existente.
Dentro del mantenimiento esto incluye poda regular (de formación y de fructificación), control de plagas y enfermedades (a menudo con tratamientos específicos), y en algunos casos, riego más frecuente.
Recolección y residuos: La caída de frutos puede generar problemas de higiene y seguridad en espacios públicos. Los frutos en descomposición atraen insectos, roedores y pueden crear superficies resbaladizas. La recolección debe ser constante y eficiente para evitar estos inconvenientes.
* Vandalismo y uso indebido: Los frutos maduros pueden ser un atractivo para el vandalismo o la recolección descontrolada por parte de los ciudadanos, lo que podría dañar los árboles y generar conflictos.