PROVEER A LA SECCIÓN DE TELARES LOS INSUMOS QUE NOS PERMITA PRODUCIR MANTAS , CAPACITAR, CREAR OFICIO, SOSTENER CON LO NECESARIO PARA SEGUIR BRINDANDO OPORTUNIDADES EN ÉSTE ESPACIO LABORAL PARA LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD; NUESTRA VISIÓN ASPIRA SER UN MEDIO FACILITADOR DE INCLUSIÓN PARA PERSONAS CON DISCAPACIDAD Y QUE ESTAS SEAN VISIBILIZADAS DESDE SUS MÚLTIPLES POTENCIALIDADES.
AL IGUAL QUE OTROS TALLERES PROTEGIDOS DEL PAÍS, MIENTRAS SE SIGUE ESPERANDO LA IMPLEMENTACIÓN DE LA LEY NACIONAL DE EMPLEO PROTEGIDO PARA PERSONAS CON DISCAPACIDAD Nº 26.816 LO CUÁL CON EL APORTE QUE LA LEY ESTABLECE QUE DEBE REALIZAR EL ESTADO, LA SITUACIÓN CAMBIARÍAS Y NOS BRINDARÍA LA POSIBILIDAD DE TRABAJAR Y CONTINUAR BRINDANDO ÉSTE ESPACIO A LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD QUE PUEDEN Y QUIEREN TRABAJAR EN UN EMPLEO PROTEGIDO. MIENTRAS TANTO LA INTENCIÓN ES SEGUIR CON LAS PUERTAS ABIERTAS, OFRECIENDO OPORTUNIDADES A LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD, MANTENER LA PRODUCCIÓN Y PODER ATENDER A LOS CLIENTES EN MEDIO DE ÉSTA SITUACIÓN DE INCERTIDUMBRE, AÚN ASÍ SEGUIMOS PONIENDO NUESTRA MIRADA EN UN HORIZONTE PRÓSPERO; CREANDO PRODUCTOS QUE PUEDAN SER INSTALADOS EN EL MERCADO Y COMERCIALIZADOS.
A C.A.DI. asisten 40 trabajadores con discapacidad en edad adultas y se
benefician directamente sus familias cubriendo un 30% de ésta población. Para
la mayoría es el único espacio de vínculo social y por ello es que aquí convive lo
laboral y lo social, acompañando a los trabajadores de manera integral.
Los Talleres Protegidos de Producción son espacios de trabajo e inclusión
laboral, siendo una de las aristas para poder abordar uno de los derechos que
todos los individuos o grupos sociales deben gozar igualando oportunidades.
La inserción laboral representa un potencial de desarrollo y de
productividad indiscutible para los mercados laborales. Exige también de la
coordinación de esfuerzos de varios actores sociales para mancomunar
esfuerzos
Entre las barreras que deben enfrentar las personas con discapacidad
adultas están: la limitada oferta de empleo, y la desventajas en el acceso a
capacitación y formación de habilidades.
Si bien existe legislación en este ámbito, son las ONG quienes llevan a cabo esta
incansable tarea. Y es el Taller Protegido de Producción quién cubre con una de
las necesidades de las personas con discapacidad adultas que es la de
dignificarse a través del trabajo a la espera de posibilidades laborales en el
mercado laboral competitivo; prolongándose este espacio en “ausencia” de otros.
El Proyecto es Factible, pasa a votación.